sábado, 29 de agosto de 2009

Contaminacion y mas contaminacion

Para desarrollar cualquier actividad, tanto por el hombre como por la Naturaleza, es necesario el consumo de energía lo que implica una liberación de calor a la ecosfera provocando una elevación térmica, que agrava todas las otras formas de contaminación, principalmente la química, provocada por las emisiones contaminantes en las zonas urbanas e industriales. La amenaza de la ruptura ecológica de la biosfera, entre la humanidad y su ambiente, se hace posible al considerar el potencial de expansión de que podrá disponer el hombre con el desarrollo de diferentes formas de energía. Lo que hace más frágil el equilibrio ecológico establecido por el hombre. El problema no es el incremento de satisfactores para el hombre sino los desequilibrios ecológicos que produce, y la capacidad que tendrá el hombre para controlar y restablecer los frágiles equilibrios ecológicos que ha generado.
Anteriormente, las alteraciones provocadas por el hombre en los sistemas naturales han sido absorbidas y neutralizadas por la adaptabilidad de los sistemas biológicos involucrados, pero actualmente el problema es diferente, las alteraciones en los equilibrios ecológicos provocadas por las actividades humanas son cada vez más complejas, más generalizadas y más inestables en tanto que la Naturaleza permanece la misma. Por lo que, se consideran como daños al ambiente a todas las consecuencias de la actividad humana que no han podido ser asimiladas por los ciclos biológicos y que tienen efectos nocivos sobre la vida animal y vegetal. En este sentido la biosfera se comporta como un gran sistema cerrado, en el que todo elemento no reciclable no puede ser reemplazado por otro menos dañino. Como se trata de procesos vivos, el regreso al estado de equilibrio inicial de tal o cual subsistema requiere de mucho tiempo del que no dispone cada ecosistema y representa una pérdida para el sistema total, la Naturaleza. La vida moderna, la comodidad, la salud y la esperanza de vida son elementos a los que nos hemos acostumbrado casi sin darnos cuenta de sus implicaciones, sin considerar tomar en cuenta los recursos humanos y materiales que han sido necesarios. El derecho a mejores condiciones de vida, a disponer de mejor salud, a contar con mejores y ágiles formas de comunicación son conquistas que difícilmente podríamos ceder, sin embargo, muchas de otras comodidades de las que disfrutamos ni son indispensables ni mejoran realmente nuestra calidad de vida. Nos olvidamos de las repercusiones de las actividades del hombre sobre la naturaleza, pensamos que la crisis energética, la contaminación ambiental y la basura la producen y la padecen otros. La degradación ecológica de la biosfera provocada por la actividad del hombre, es sólo el hombre el responsable de disminuirla o evitarla al máximo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario